Tu recuerdo perdurará siempre, tu sonrisa, tu cariño y tu bondad son flores perfumadas y agua que riegan nuestros corazones heridos y que sirve para mitigar nuestro dolor.
Allá donde estés junto a tus seres queridos y junto al Padre Eterno, vela por todos nosotros, como un ángel de la guarda que ya eres para todos nosotros...besos hijo mío....
En la primera fotografía estás con esa sonrisa eterna que tenías, y en la otra fotografía estás junto a tu perrita Shacha que tanto querías, pues eras amante de los animales.
(fotos de Isa Ruiz y J. Ruiz Quesada)