Ya ha finalizado la Semana Santa en nuestra Ciudad de Úbeda Patrimonio de la Humanidad..., el resultado en cuanto a desfiles procesionales ha sido muy deslucido debido a las lluvias que aparecieron en momentos inoportunos suspendiéndose algunas procesiones e imterrupiéndose otras que habían comenzado a procesionar.
El comienzo y el final ha sido muy bello y sin inconvenientes, realizándose los desfiles de la Entrada de Jesús en Jerusalén y Jesús Resucitado el domingo de Ramos y domingo de Resurrección respectivamente sin anomalías del tiempo, dos días muy buenos de sol.
El Jueves Santo y Viernes Santo fueron los peores días por las lluvias y chaparrones que hicieron acto de presencia antes y durante las procesiones.
Comenzó el Jueves con la magnífica procesión de la Oración de Jesús en el Huerto y Virgen de la Esperanza, sin novedad y con un sol radiante desfilo la citada Hermandad. La tarde cárdena de la Columna se volvió gris y un fuerte chaparrón impidió hacer su salida penitencial a Jesús atado a la Columna y a María Santísima de la Caridad, el largo guión entró en el templo de san Isidoro con las capas y capirucho mojados por la fina lluvia caída.
Los romanos del Santísimo de la Humildad también sufrieron el azote del agua y la cofradía del Santísimo de la Humildad y Ntra. Sra. de la Fe no pudieron pasear por las calles de Úbeda. ambas cofradías realizaron un emotivo acto dentro del templo. Así mismo el Cristo de la Buena Muerte tampoco pudo realizar su desfile penitencial y el guión negro como la misma noche quedó en un mar de sentimientos rotos por la suspensión de la procesión.
Comenzó el Viernes Santo con el guión nazareno en la Casa de Hermandad guardando la hora de partir para Santa María y procesionar al Señor de Úbeda, Nuestro Padre Jesús Nazareno Llamado de las Aguas..., esta bella y Venerada Imagen se quedó un año más sin poder pasear por las vetustas calles de la Ciudad Monumental, pues una fina lluvia le hizo desistir a la Cofradía. Dentro del Templo de Santa María lleno de cofrades vestidos de nazareno y devotos se realizó otro bonito y emotivo acto religioso, además se interpretaron las marchas de los titulares. La Virgen de los Dolores llevada por sus costaleros avanzó hasta situarse frente a su Hijo Jesús mientras los acordes de las notas de Dolorosa interpretadas magistralmente por la Agrupación Musical Santa Cecilia de Úbeda llenaban el auditorio. Tanto la marcha Dolorosa como el rancio y emotivo Miserere se interpretaron dos veces.
La Hermandad de la Caída y Virgen de la Amargura si realizó su desfile procesional y el Cristo de Benlliure lució espléndidamente estrenando unos bellos faroles realizados por la casa Angulo de Lucena, aunque su recorrido fue acortado en gan medida por la posibilidad de lluvia.
Las Cofradías del Santísimo de la Expiración y la Virgen de las Angustias y Descendimiento de Cristo iniciaron sus procesiones pero fueron suspendidas por la fina lluvia que apareció en un momento de su recorrido, a las Angustias casi al principio de su inicio por la calle Sagasta y a la Expiración por la calle Rastro.
Así mismo la Magna Procesión General fue suspendida porque el tiempo era desapacible y se preveían lluvias. Por tal motivo la Cofradía del Santo Entierro de Cristo y Santo Sepulcro suspendió su desfile..., no así la Cofradía gremial de la Virgen de la Soledad, esta realizó todo su recorrido a pesar de la fina lluvia que fue cayendo durante su trayecto.
Yo personalmente la acompañé en toda su procesión y lo pude comprobar, sus costaleros llevaron a la Virgen con gran solemnidad, el nuevo capataz, el cofrade Melchor pudo realizar su sueño de dirigir los pasos de la Reina de san Millán.
Y esta es una breve reseña de esta Semana Santa que será recordada por las lluvias de abril que impidió a muchas cofradías realizar su Estación de Penitencia. La fotografía que acompaña al texto corresponde a la subida por la Cuesta de la Merced a la Virgen de la Soledad por los costaleros.
(foto de J. Ruiz Quesada)